Estudio Bíblico

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Módulo 117. Los Dones Motivacionales.



4.2 El don motivacional de profecía.


Características.

Las personas que poseen este don manifiestan las siguientes características en su vida diaria y en la relación con los demás:

• Tiene que ver con hablar, declarar, proclamar, decir en voz alta la Palabra de Dios para una situación y/o persona o grupo de personas específicas.
o Sienten frecuentemente la necesidad de expresarse verbalmente.
o Como resultado, desarrollan sus dones verbales hasta el punto que los demás pueden llegar a sentir sus palabras en extremo persuasivas o amenazadoras.
o Poseen una gran capacidad de persuasión.

• Tienen una forma directa, muy franca, de presentar sus puntos de vista, al punto de que los demás, en algún momento, pueden sentirlos faltos de tacto o imprudentes.
o Con una persona así, no hay vacilación ni dudas.
o Dicen la verdad tal como la ven, sin tapujos.
o Todo lo que creen que es recto, esto hacen, sin importarles las consecuencias.

• Son personas de principios fuertes.
o Poseen una voluntad fuerte que atrae o repele a los demás.
o Van a permanecer firmes y siempre dirán la misma cosa y hablarán de la misma manera: con firmeza, sin miedo, claramente, de modo consecuente.
o Esperan que los demás amolden sus pensamientos y voluntad a la suya.
o Ven todo como blanco o negro, correcto o incorrecto (algunos piensan de ellos como que absolutistas, radicales y/o fanáticos), y no admiten componendas por ninguna razón, ni aún por amor a la opinión pública.
o Poseen una fuerte motivación hacia la verdad más que hacia la diplomacia o el tacto, de tal manera que cada vez que pueden sacan a luz el engaño, aún cuando esto conlleve un riesgo personal.
o Por las características de su don, no muestran tolerancia para con las medias verdades y la falta de exactitud, a las que consideran peligrosas por ser caminos encubiertos que pueden conducir a mentiras significativas.
o Tienen una gran fortaleza para mantenerse en su posición y perseverar en contra de todas las fuerzas que se les opongan, aunque estén solos en el asunto.
o No ceden a las opiniones de los demás, a menos que les demuestren que son justificadas, veraces y razonables.

• Buscan la acción intensa porque no son conformistas.
o Tienden a meterse donde el combate es más reñido, no rehuyen la confrontación; es más, les atrae cuando se trata de sacar a luz la verdad y liberar a las personas, aunque ello implique dolor.
o No rehuyen la confrontación y la polémica, más bien, se sienten estimulados por ella cuando visualizan que los resultados pueden valer la pena. Cuando estiman que los resultados posibles no lo ameritan, no se meten en ellas.
o Por su tendencia a la confrontación y a participar en los asuntos polémicos, a los demás les puede parecer que disfrutan de los conflictos con otros.
o Por su firmeza, pareciera que son competitivos y no aceptan la derrota, lo cual es verdad cuando se trata de que la verdad sea expuesta y triunfe.
o Pueden parecer que son provocativo hacia los demás por sus actitudes radicales.

• Son dados a dramatizar las situaciones con miras a convencer a los demás de sus argumentos y razones.

• Tienen una gran dosis de iniciativa.

• Tienden a tener un limitado número de contactos personales íntimos, excepto con un pequeño circulo de cercanos. Ello es así, muchas veces, no por ellos, sino porque los demás no se les acercan por temor a su franqueza o disgusto por sus posiciones radicales.

• Para ellos, la Palabra de Dios quiere decir e implica exactamente lo que dice.

• Son líderes, y a veces, cruzados, luchando contra la corriente.
o Son capaces de resistir el dolor, la presión y la persecución, a veces sin notarlas, o hacerles caso.

• Despliegan gran confianza y autoridad.

• Tienen la capacidad de discernir los motivos detrás de las acciones.

• Parecieran conocer todas las cosas (1 Cor 13:2).

• Ejemplo bíblico: los profetas del Antiguo Testamento, Hch 11:27-30, 21:9-14, Agabo.


Malos entendidos y/o peligros.

En las etapas inmaduras del desarrollo del don, o cuando este no está sujeto a la dirección del Espíritu Santo sino de la carne, la persona que posee este don puede llegar a caer en alguna o varias de estas situaciones:

• Por su franqueza pueden dar la impresión o llegar a ser faltos de misericordia y amor.

• Por su pasión con respecto a sus opiniones pueden llegar a tratar de imponer sus ideas a como de lugar, incluso mediante la agresión verbal, la fuerza, la rudeza y/o la manipulación.

• No les importa si los otros no están de acuerdo con ellos y no les importan las ideas de los demás, llegando incluso a menospreciar a los que no piensan como ellos.

• Son dogmáticos e inflexibles.

• Desarrollan una actitud de autosuficiencia.

• Se llegan a sentir estimulados por la confrontación y la polémica, independientemente de que entienda la situación o no.



26 Ene 2012