Estudio Bíblico

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El tribunal de Cristo y las Bodas del Cordero.



LOS ULTIMOS TIEMPOS DE LA HISTORIA (14).

EL TRIBUNAL DE CRISTO Y LAS BODAS DEL CORDERO.



El trono del juicio de Cristo.

Ocurrirá en un tiempo entre el arrebatamiento y la gran tribulación.
Allí los miembros de la iglesia serán recompensados por su servicio fiel (1 Cor 3:10-15, 2 Cor 5:10), lo que implica que es un juicio de los creyentes.
El evento central de la historia es el sufrimiento y la muerte de Cristo. Nuestra confianza y aceptación personal de esto determinará el resultado del juicio eterno. Aquel que crea en el Señor Jesús será justificado y será recompensado por las obras que haya hecho como hijo de Dios. Aquel que no crea en Él, será condenado.

Algunos de los principios de este evento relacionados con el juicio eterno son:
Jesucristo pagó por todos nuestros pecados (Isa 53:6).
Jesús es el Cordero de Dios entregado para borrar nuestros pecados (Zac 13:11).
Humillarse y arrepentirse es lo que produce el perdón de pecados (Hch 2.38).
No todos los hombres aceptan el perdón de pecados (Mr 16.15).
Aceptar la Salvación es escribir su nombre en el Libro de la Vida.
Es una decisión de cada persona recibir el regalo del perdón de pecados (Juan 3:14-15).
Al morir ya estaba decidido hacia donde había de dirigirse. (Ecl 11:3).

Los creyentes serán juzgados por su Señor con respecto a la mayordomía de los talentos, dones, oportunidades, y responsabilidades que se le hayan concedido en el curso de su vida.
La referencia a este juicio en 1 Ped 1:17 resulta particularmente significativa, en lo que hace a la especificación de su carácter.
El juicio divino del pueblo de Dios será un juicio paternal.
No tendrá el efecto de hacer peligrar la posición del creyente en el seno de la familia de Dios; se hará con toda la comprensión y la compasión de un padre; pero no por ello ha de tomarse con liviandad o descuidadamente.
Este juicio paternal lo llevará a cabo Cristo cuando vuelva.


El tribunal de Cristo
Todos los justos daremos cuenta a Cristo de lo que hayamos hecho, sea bueno o malo (2 Cor 5:10) y nos presentaremos ante su tribunal (Rom 14:10-12).
Todos recibirán recompensa por lo bueno que hayan hecho (1 Cor 3:8).
Los principios de este juicio son:
• Las obras se probarán en el fuego.
• Toda obra será probada, la que permanezca será aprobada y la que se queme no.
• La obra que permanezca recibirá galardón.
El creyente no se perderá de ninguna manera como resultado de este juicio, todos permanecerán salvos pero si no tienen obras que permanezcan, lo serán como por fuego (1 Cor 3:15).
Tres formas para probar nuestras obras ante el tribunal de Cristo.
• Por el motivo que se hizo o las intenciones del corazón.
• Por la obediencia al Señor.
• Por el poder o efectividad de ésta.


El banquete de las bodas del Cordero.
Después del juicio de Cristo tendrá lugar en el cielo una boda.
La Iglesia (la novia de Cristo) y nuestro Señor Jesucristo se casarán oficialmente.
Mientras la tierra sufre las últimas convulsiones de la tribulación, y antes de la Manifestación Gloriosa, la iglesia disfruta de una boda celestial y luego el banquete de la fiesta (Apo 19:9).
Los invitados, no son los miembros de la Iglesia pues ellos son la novia.
Jn 3:29: Juan el Bautista se identifica como “amigo del novio”, lo que sería una indicación que los amigos serían los santos fieles del Antiguo Testamento incluyendo a los que hubieran muerto o sido martirizados en el tiempo ya pasado de la tribulación.



20 Abr 2009