Módulo 209. Un modelo de cuidado pastoral (la ruta de trabajo).
TEMA No. 9.
LOS INSTRUMENTOS DE LA RUTA DEL CRECIMIENTO.
Grupos en casa.
Son grupos para el evangelismo y el cuidado de las personas (asistentes a la iglesia o no) que bajo la dirección de un Asistente Pastoral se reúnen semanalmente en una casa o en otro lugar apropiado, por lo general fuera de las instalaciones de la iglesia, para compartir un tiempo de adoración a Dios, enseñanza de la Palabra, oración y comunión.
El objetivo general principal de estos grupos es actuar como una puerta de entrada o de enlace entre aquellas personas que no asistirían tan fácilmente a un servicio en una iglesia pero que si estarían dispuestas a asistir a una reunión pequeña en una casa.
Es un grupo eminentemente evangelístico y de cuidado pastoral cuyo objetivo es exponer a las personas a la Palabra de Dios, ser convencidas de pecado por el Espíritu Santo y recibir a Jesús como su Señor y Salvador, y posteriormente a ello, brindarles los primeros “cuidados” necesarios para que su vida espiritual se consolide. Hay cinco procesos que son campos de intervención naturales a estos grupos:
• El evangelismo.
• La consolidación.
• Los primeros cuidados para la sanidad, liberación y restauración de las personas.
• Proveerles compañerismo, seguridad, aceptación, pertenencia y amor.
• Motivar a sus miembros a seguir las diferentes etapas posteriores de la ruta del crecimiento.
Las reuniones de estos grupos no son un servicio en el estricto sentido de la Palabra (masividad, estructuración, formalidad, etc.), sino una actividad donde se comparte de manera sencilla y dinámica la vida en y de Dios.
Son lugares a donde los miembros de la congregación asisten para ser cuidados y atendidos en una forma más personalizada, mientras van avanzando e incorporándose a los siguientes pasos y grupos o reuniones que forman parte de la ruta del crecimiento (Centros de Equipamiento, grupos de discipulado, etc.), a la vez que constituyen pequeños centros de equipamiento y entrenamiento para poner en práctica el aspecto relacional y ministerial de la vida cristiana.
Lo más importante de estos grupos no es necesariamente la reunión sistemáticamente en una casa, sino la relación de cuidado, apoyo, unidad, compañerismo y equipo que se establece entre sus miembros.
Estos grupos pueden ser homogéneos (la misma área de interés como profesión, situación civil, edad, sexo, etc.,) o heterogéneos (diferentes áreas de interés, profesión, situación civil, edad, sexo, etc.).
Consolidación.
Es la serie de actividades que a partir del grupo de evangelismo o de otra instancia de la Iglesia, se realizan con el objeto de acompañar al nuevo creyente a dar sus primeros pasos en Cristo, apoyándolo, animándolo, fortaleciéndolo, haciéndolo sentir parte de la familia de Dios, hasta que queda establecido en la congregación y en un grupo en casa, que de allí en adelante asumen la responsabilidad de llevar adelante al nuevo creyente en su vida en Cristo.
Esta etapa es realizada, ya sea por el Asistente Pastoral a cargo de un grupo en casa, o por uno de los miembros de su grupo que ya estén en etapas más avanzadas de la ruta del crecimiento, o por el grupo de Consolidación de la Iglesia.
En la medida de lo posible el proceso de consolidación y las tareas que ello conlleva deben iniciar no más tarde de los dos días posteriores a la conversión del nuevo creyente, para evitar que los problemas (dudas, críticas, persecución, etc.) puedan derivar de su conversión puedan enfriar su decisión.
En esta etapa se le enseñan las fundamentos básicos al nuevo creyente para adquirir como hábito, algunas de las actividades que son necesarias para su desarrollo como creyente:
• Orar a Dios.
• Leer la Palabra.
• Congregarse.
• El Bautismo en Agua.
• El Bautismo en el Espíritu Santo.
Actividades de sanidad, liberación y restauración.
Son retiros, seminarios, talleres y/o ministraciones personalizadas que se desarrollan con el objeto de proveer a los miembros de la iglesia (recién convertidos o no), de oportunidades para conocer la verdad del Evangelio y de sus vidas que les ayuden a alcanzar la libertad en Cristo en todas las áreas de su vida: espiritual, psicológica –alma-, física, relacional, etc., para que sus vidas sean radicalmente transformadas (Gen 32:24-31).
• Como su nombre lo indica, fundamental se enfocan en la sanidad, liberación y restauración del creyente.
• Se enfocan fundamentalmente en cinco áreas temáticas: arrepentimiento, sanidad, liberación, identidad y llenura.
• Su objetivo es proveer oportunidades para que los creyentes, mediante la obra del Espíritu Santo, podamos ser liberado de todos aquellos temas de la vieja manera de vivir que constituyan un obstáculo para vivir la nueva vida en Cristo y desarrollar el fruto del Espíritu y el carácter de Cristo en nosotros.
A estas actividades, de preferencia (aunque no por norma), debieran asistir las personas que ya hayan sido salvas y estén asistiendo a un grupo en casa o a la Iglesia, para facilitar el seguimiento posterior y la continuidad del proceso.
Es vital garantizar la continuidad del proceso para evitar que la liberación y la sanidad de la persona, alcanzadas en alguna de estas actividades, se pierdan y la situación de la persona se deteriore posiblemente más que antes de asistir a alguna de ellas (Mat 12:43-45, Luc 11:24-26).
Por ello es que es importante que esas personas estén involucradas en un grupo en casa o en la Iglesia.
Centro de Equipamiento.
Son una serie de enseñanzas impartidas al creyente para:
• Enseñarle los principios bíblicos que aplican a todas las áreas y actividades de su vida, para que las ponga en práctica como discípulo de Cristo (Centro de Equipamiento para la vida cristiana).
• Enseñarle los principios bíblicos que aplican al trabajo necesario para comenzar a guiar a otros a través de la ruta del crecimiento y de los instrumentos de ella, así como enseñarle las técnicas básicas para ser un buen asistente pastoral.
• Enseñarle los fundamentos básicos para desarrollar los dones, el llamado y el ministerio que ha recibido de parte de Dios.
• Impartirle la formación básica en el servicio, la visión y la ruta del crecimiento.
Consejería.
Es un proceso al cual es conveniente que se someta cada persona con aspiraciones a convertirse en un discípulo de Cristo.
Consiste en una serie de reuniones entre el discípulo y el discipulador (por ejemplo, el Asistente Pastoral a cargo del grupo en casa al cual asiste) para examinar el desarrollo cristiano de las distintas áreas de su vida, los problemas que enfrenta en cada una de ellas y las acciones específicas a emprender para avanzar en su desarrollo.
Seminarios y talleres.
Son una serie de enseñanzas sistemáticas de principios generales sobre temas relacionados con cada una de las áreas de la vida de la persona, que tiene por objeto renovar su entendimiento de ellas a la luz de la Palabra de Dios, y tomar las acciones necesarias para que el Señorío de Cristo y la libertad que tenemos en El se manifiesten plenamente.
Lanzamiento.
Es un retiro de un día en donde las personas son enviadas bajo y con autoridad al servicio del Señor.
Se ministra el corazón de Dios por las almas y un cambio de mentalidad de ovejas a obreros.
Se habilita a la persona a abrir un grupo en casa.
Equivale, en el lenguaje pesquero de Cristo, al envio del pescado al mercado.
• La búsqueda de nuevos “consumidores”.
• Impartición y habilitación para el servicio.
• Convertirse en pescadores de hombres.
Grupos de discipulado.
Cada persona, dentro de la ruta de crecimiento y en aplicación a lo que dice la Palabra acerca de cada una de ellas (2 Cor 5:18, Mat 28.18-20, 2 Tim 2:2, etc.), no solo es llamada a pertenecer a un grupo en casa, sino a ser un asistente pastoral a cargo de uno.
Una vez arrancado el grupo en casa del cual se convierte en Asistente Pastoral, se incorpora a un grupo de discipulado para asistentes pastorales a cargo de grupos en casa para desarrollar actividades sistemáticas de comunión, compañerismo, intercambio de experiencias y discipulado.
Implica que se convierte de receptor en dador de:
• Cuidado paternal.
• Discipulado.
• Apoyo, ánimo, exhortación, restauración, corrección.
Escuela Ministerial.
Desarrollar destrezas y habilidades en las personas para perfeccionar el llamado y el ministerio que Dios les ha dado.
LOS INSTRUMENTOS DE LA RUTA DEL CRECIMIENTO.
Grupos en casa.
Son grupos para el evangelismo y el cuidado de las personas (asistentes a la iglesia o no) que bajo la dirección de un Asistente Pastoral se reúnen semanalmente en una casa o en otro lugar apropiado, por lo general fuera de las instalaciones de la iglesia, para compartir un tiempo de adoración a Dios, enseñanza de la Palabra, oración y comunión.
El objetivo general principal de estos grupos es actuar como una puerta de entrada o de enlace entre aquellas personas que no asistirían tan fácilmente a un servicio en una iglesia pero que si estarían dispuestas a asistir a una reunión pequeña en una casa.
Es un grupo eminentemente evangelístico y de cuidado pastoral cuyo objetivo es exponer a las personas a la Palabra de Dios, ser convencidas de pecado por el Espíritu Santo y recibir a Jesús como su Señor y Salvador, y posteriormente a ello, brindarles los primeros “cuidados” necesarios para que su vida espiritual se consolide. Hay cinco procesos que son campos de intervención naturales a estos grupos:
• El evangelismo.
• La consolidación.
• Los primeros cuidados para la sanidad, liberación y restauración de las personas.
• Proveerles compañerismo, seguridad, aceptación, pertenencia y amor.
• Motivar a sus miembros a seguir las diferentes etapas posteriores de la ruta del crecimiento.
Las reuniones de estos grupos no son un servicio en el estricto sentido de la Palabra (masividad, estructuración, formalidad, etc.), sino una actividad donde se comparte de manera sencilla y dinámica la vida en y de Dios.
Son lugares a donde los miembros de la congregación asisten para ser cuidados y atendidos en una forma más personalizada, mientras van avanzando e incorporándose a los siguientes pasos y grupos o reuniones que forman parte de la ruta del crecimiento (Centros de Equipamiento, grupos de discipulado, etc.), a la vez que constituyen pequeños centros de equipamiento y entrenamiento para poner en práctica el aspecto relacional y ministerial de la vida cristiana.
Lo más importante de estos grupos no es necesariamente la reunión sistemáticamente en una casa, sino la relación de cuidado, apoyo, unidad, compañerismo y equipo que se establece entre sus miembros.
Estos grupos pueden ser homogéneos (la misma área de interés como profesión, situación civil, edad, sexo, etc.,) o heterogéneos (diferentes áreas de interés, profesión, situación civil, edad, sexo, etc.).
Consolidación.
Es la serie de actividades que a partir del grupo de evangelismo o de otra instancia de la Iglesia, se realizan con el objeto de acompañar al nuevo creyente a dar sus primeros pasos en Cristo, apoyándolo, animándolo, fortaleciéndolo, haciéndolo sentir parte de la familia de Dios, hasta que queda establecido en la congregación y en un grupo en casa, que de allí en adelante asumen la responsabilidad de llevar adelante al nuevo creyente en su vida en Cristo.
Esta etapa es realizada, ya sea por el Asistente Pastoral a cargo de un grupo en casa, o por uno de los miembros de su grupo que ya estén en etapas más avanzadas de la ruta del crecimiento, o por el grupo de Consolidación de la Iglesia.
En la medida de lo posible el proceso de consolidación y las tareas que ello conlleva deben iniciar no más tarde de los dos días posteriores a la conversión del nuevo creyente, para evitar que los problemas (dudas, críticas, persecución, etc.) puedan derivar de su conversión puedan enfriar su decisión.
En esta etapa se le enseñan las fundamentos básicos al nuevo creyente para adquirir como hábito, algunas de las actividades que son necesarias para su desarrollo como creyente:
• Orar a Dios.
• Leer la Palabra.
• Congregarse.
• El Bautismo en Agua.
• El Bautismo en el Espíritu Santo.
Actividades de sanidad, liberación y restauración.
Son retiros, seminarios, talleres y/o ministraciones personalizadas que se desarrollan con el objeto de proveer a los miembros de la iglesia (recién convertidos o no), de oportunidades para conocer la verdad del Evangelio y de sus vidas que les ayuden a alcanzar la libertad en Cristo en todas las áreas de su vida: espiritual, psicológica –alma-, física, relacional, etc., para que sus vidas sean radicalmente transformadas (Gen 32:24-31).
• Como su nombre lo indica, fundamental se enfocan en la sanidad, liberación y restauración del creyente.
• Se enfocan fundamentalmente en cinco áreas temáticas: arrepentimiento, sanidad, liberación, identidad y llenura.
• Su objetivo es proveer oportunidades para que los creyentes, mediante la obra del Espíritu Santo, podamos ser liberado de todos aquellos temas de la vieja manera de vivir que constituyan un obstáculo para vivir la nueva vida en Cristo y desarrollar el fruto del Espíritu y el carácter de Cristo en nosotros.
A estas actividades, de preferencia (aunque no por norma), debieran asistir las personas que ya hayan sido salvas y estén asistiendo a un grupo en casa o a la Iglesia, para facilitar el seguimiento posterior y la continuidad del proceso.
Es vital garantizar la continuidad del proceso para evitar que la liberación y la sanidad de la persona, alcanzadas en alguna de estas actividades, se pierdan y la situación de la persona se deteriore posiblemente más que antes de asistir a alguna de ellas (Mat 12:43-45, Luc 11:24-26).
Por ello es que es importante que esas personas estén involucradas en un grupo en casa o en la Iglesia.
Centro de Equipamiento.
Son una serie de enseñanzas impartidas al creyente para:
• Enseñarle los principios bíblicos que aplican a todas las áreas y actividades de su vida, para que las ponga en práctica como discípulo de Cristo (Centro de Equipamiento para la vida cristiana).
• Enseñarle los principios bíblicos que aplican al trabajo necesario para comenzar a guiar a otros a través de la ruta del crecimiento y de los instrumentos de ella, así como enseñarle las técnicas básicas para ser un buen asistente pastoral.
• Enseñarle los fundamentos básicos para desarrollar los dones, el llamado y el ministerio que ha recibido de parte de Dios.
• Impartirle la formación básica en el servicio, la visión y la ruta del crecimiento.
Consejería.
Es un proceso al cual es conveniente que se someta cada persona con aspiraciones a convertirse en un discípulo de Cristo.
Consiste en una serie de reuniones entre el discípulo y el discipulador (por ejemplo, el Asistente Pastoral a cargo del grupo en casa al cual asiste) para examinar el desarrollo cristiano de las distintas áreas de su vida, los problemas que enfrenta en cada una de ellas y las acciones específicas a emprender para avanzar en su desarrollo.
Seminarios y talleres.
Son una serie de enseñanzas sistemáticas de principios generales sobre temas relacionados con cada una de las áreas de la vida de la persona, que tiene por objeto renovar su entendimiento de ellas a la luz de la Palabra de Dios, y tomar las acciones necesarias para que el Señorío de Cristo y la libertad que tenemos en El se manifiesten plenamente.
Lanzamiento.
Es un retiro de un día en donde las personas son enviadas bajo y con autoridad al servicio del Señor.
Se ministra el corazón de Dios por las almas y un cambio de mentalidad de ovejas a obreros.
Se habilita a la persona a abrir un grupo en casa.
Equivale, en el lenguaje pesquero de Cristo, al envio del pescado al mercado.
• La búsqueda de nuevos “consumidores”.
• Impartición y habilitación para el servicio.
• Convertirse en pescadores de hombres.
Grupos de discipulado.
Cada persona, dentro de la ruta de crecimiento y en aplicación a lo que dice la Palabra acerca de cada una de ellas (2 Cor 5:18, Mat 28.18-20, 2 Tim 2:2, etc.), no solo es llamada a pertenecer a un grupo en casa, sino a ser un asistente pastoral a cargo de uno.
Una vez arrancado el grupo en casa del cual se convierte en Asistente Pastoral, se incorpora a un grupo de discipulado para asistentes pastorales a cargo de grupos en casa para desarrollar actividades sistemáticas de comunión, compañerismo, intercambio de experiencias y discipulado.
Implica que se convierte de receptor en dador de:
• Cuidado paternal.
• Discipulado.
• Apoyo, ánimo, exhortación, restauración, corrección.
Escuela Ministerial.
Desarrollar destrezas y habilidades en las personas para perfeccionar el llamado y el ministerio que Dios les ha dado.
05
Jul
2012