Estudio Bíblico

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Sal 16. Las delicias de ser un hijo de Dios



Sal 16.

Vrs. 1. Confiar en Dios: creer en Él tal como Él está descrito en la Biblia (Jn 17:3). No tener nuestra propia idea de Él. (Heb 11:6).

Vrs. 2. Tú eres mi Señor. Rom 10:8-10. Creer con el corazón en Jesús como el Señor de nuestras vidas. No asentimiento mental, sino una convicción profunda y certeza en el corazón (Hebg 11:1).
Vrs. 2. No hay para mi bien fuera de Tí. Que Él sea nuestro todo; ya no vivir nosotros, que Él viva en nosotros. Poner nuestra mirada en Él, en las cosas eternas, no en lo temporal.

Vrs. 3. Para los santos que están en la tierra y para los íntegros, es toda mi complacencia. Somos Su gozo, Su deleite, la niña de Sus ojos, como un bebé en los brazos de Papá. De la misma manera que Él se complace en Cristo se complace en nosotros.

Vrs. 4. Se multiplicarán los dolores de aquellos que sirven diligentes a otro dios (comenzando por el "yo", el "ego", la "carne". Él está airado contra el pecador todos los días (Sal 7:11). Tiene compasión por ellos pero nos los ama como nos ama a nosotros Sus hijos.

Vrs. 5. Jehová es la porción de mi herencia y de mi copa. Como los lévitas en el Antiguo Testamento que no tuvieron herencia de la tierra prometida, sino que Él Señor fue su herencia, de la misma manera, nosotros como reyes y sacerdotes para Él (Apo 1:5-6), Él es nuestra heredad y herencia.
Vrs. 5. Tú sustentas mi suerte. Él tiene el control completo de nuestra vida y Él quiere lo mejor para nosotros: llevarla en aumento (Prov 4:18) y planes de bien para darnos un futuro y una esperanza (Jer 29:11). Pero necesitamos caminar en Su buena voluntad, agradable y perfecta (Rom 12:1) renovando nuestra manera de pensar (ya no pensar como el mundo, como aprendimos antes de conocerle, sino pensar de acuerdo a la Palabra).

Vrs. 6: Las cuerdas me cayeron en lugares deleitosos (Mat 11:28-30). La obediencia en la clave (Deut 28:1-2, Mat 6:33). No hay separación entre mandamientos y promesas. En Dios están unas relacionadas. No hay obediencia sin promesa, y no hay promesa sin obediencia.
Vrs. 6. Es hermosa la heredad que me ha tocado. Nuestra propiedad y herencia es Dios, nuestro Padre; en Él estamos completos y todo lo que es de Él es nuestro; somos Sus herederos y co-herederos con Cristo.

Vrs. 7. Bendeciré a Jehová que me aconseja. Él quiere darnos dirección en todos los aspectos de nuestra vida, grandes y pequeños, para que nos vaya bien en todo, todo el tiempo. El Espíritu Santo que ha hecho morar en nosotros es Espíritu de Sabiduría, Consejo, Entendimiento, Ciencia, Conocimiento, Poder, Verdad, Santidad, etc. Y todo ello está a nuestra disposición para que lo consultemos. Él quiere ser parte de toda nuestra vida, de todos los detalles de ella (Sant 4:5).
Vrs 7. Aún en las noches me enseña mi conciencia. Examinar nuestro caminar cada día (Sal 119:59), arrepentirnos y pedirle perdón por lo que no fue conforme a Su voluntad para que Sus misericordias nuevas cada mañana las podamos experimentar plenamente (Lam 3:22-23).

Vrs. 8. A Jehová he puesto siempre delante de mi; porque está a mi diestra no seré conmovido. Consultarle todas nuestras decisiones; conformarlas a Su Palabra y a la dirección del Espíritu Santo.

Vrs. 9. Se alegró por tanto mi corazón y se gozó mi alma; mi carne también reposará confiadamente. Como consecuencia de todo lo anterior tendremos experimentaremos firmeza, gozo, seguridad, protección, plenitud.

Vrs. 10. Porque no dejarás mi alma en el Seol, ni permitirás que tu santo vea corrupción.. Redención total y vida eterna. Fuimos sellados por el Espíritu Santo que es la garantía de nuestra redención final (la entrada a la plenitud de la eternidad). Cristo en nosotros, la esperanza de gloria (Col 1:27),

Vrs 11. Me mostrarás la senda de la vida (Sal 23:2): lugares de reposos, delicados pastos, sendas de justicia por amor de Su Nombre.
Vrs. 11. En Tú presencia hay plenitud de gozo; delicias a tu diestra para siempre. Su gozo es nuestra fortaleza: seguridad, protección.

19 Mar 2022