ABBA PADRE. Los regalos del Padre (7).
Su Palabra y Su Espíritu Santo.
• Son los dos regalos más grandiosos, espectaculares, infinitos y eternos que Dios nos ha dado como hijos después de la salvación.
• Pero necesitamos aprovecharlos al máximo: de ello depende nuestra calidad de vida en la tierra y en la eternidad (plenitud, abundancia, prosperidad, bienestar, etc.).
• Pero para aprovecharlos necesitamos entender para que nos han sido dados.
○ El ser humano tiene un alma que debe estar modelada por los pensamientos y las emociones que nos dirigen a tomar decisiones sabias (el corazón), y cada uno de esos elementos corresponde a un tipo de inteligencia necesaria.
○ Los pensamientos corresponden al tipo de inteligencia racional (que tiene que ver con el entendimiento de las cosas y del mundo que nos rodea).
○ Las emociones a la inteligencia emocional (que tiene que ver con la forma de relacionarnos adecuadamente con las cosas en función de las personas, los demás y nosotros mismos (empatía).
• Para tomar decisiones sabias necesitamos la participación de todo nuestra alma (por ello el Señor nos llama a amarlo con toda nuestra alma: pensamientos y sentimientos).
○ Ambos, pensamientos y sentimientos derivan de las consecuencias de la experiencia pasada, por ello el Señor nos llama a renovar el alma que anteriormente era egoísta y egocéntrica, con sus pensamientos y emociones (amor a Dios, al prójimo y a nosotros mismos).
○ La combinación de ambas nos permite tomar buenas decisiones.
§ La Palabra apunta en primer lugar a alimentar y dirigir nuestros pensamientos a la decisión racional correcta (amor a Dios) y también nos enseña a discernir los sentimientos que son conforme a su corazón de los que son contrarios a Su corzón.
§ El Espíritu Santo nos ayuda a dirigir la aplicación de esos pensamientos de una forma empática (amor al prójimo y a nosotros mismos).
○ Es en la combinación de ambos que tomamos decisiones sabias "La letra mata pero el Espíritu vivifica" (2 Cor 3:6).
• Por otro lado, los pensamientos nos dirigen al conocimiento, al entendimiento (que debe ser balanceado con la revelación), mientras el Espíritu nos dirige a la revelación (que debe ser consecuente y balanceada por la Palabra --pensamiento--)
○ Si somos solo racionales: fríos, rígidos. inflexibles, juzgadores, faltos de empatía (solo racionales: legalistas).
○ Si somos solo emocionales: seremos fácilmente engañados, de doble ánimo, sujetos a cambios explosivos de carácter (bipolares). Solo emocionales (sin fondo, superficiales).
○ Necesitamos desarrollar ambas inteligencias para vivir una vida equilibrada.
• Y el regalo de Dios para nosotros, para que alcancemos esa meta son ambos: la Palabra y el Espíritu Santo.
○ La Palabra (el consejo completo: equilibrio en nuestro pensamiento).
§ 2 Cor 4:4. "en los cuales el dios de este siglo cegó el entendimiento de los incrédulos, para que no les resplandezca la luz del evangelio de la gloria de Cristo, el cual es la imagen de Dios."
§ Sal 119:18-19. "Abre mis ojos, y miraré las maravillas de tu ley. Forastero soy yo en la tierra; no encubras de mí tus mandamientos."
§ Sal 119:105. "Lámpara es a mis pies tu palabra, y lumbrera a mi camino."
§ Jn 8:31-32. Conoceremos la Verdad y la Verdad nos hará libres: del dolor, del resentimiento, de las obras de las tinieblas, del miedo, de la ansiedad, de la angustia, del stres, de la depresión, de la tristeza, de la frustración, de la decepción, del desánimo, en fin, de toda emoción negativa.
○ La condición para todo ello:
§ Sal 119:59: consideré mis caminos y volví mis pies a tus testimonios.
• El Espíritu Santo:
○ Nos empodera para guardar la Palabra (Jn 14:15-17).
○ Derrama el amor de Dios en nuestros corazones.
○ Nos redargüye y corrige.
○ Produce en nosotros el fruto del Espíritu.
○ Nos enseña.
○ Nos guía.
○ Nos fortalece.
○ Nos consuela.
○ Nos ayuda en todas las cosas y entre ellas, la oración que nos muestra las cosas grandes y ocultas que no conocemos.
○ Nos defiende.
○ Nos santifica.
• La Palabra y el Espíritu actúan en conjunto en nosotros (colaboración, sinergia) para alcanzar la plenitud de vida.
• Son los dos regalos más grandiosos, espectaculares, infinitos y eternos que Dios nos ha dado como hijos después de la salvación.
• Pero necesitamos aprovecharlos al máximo: de ello depende nuestra calidad de vida en la tierra y en la eternidad (plenitud, abundancia, prosperidad, bienestar, etc.).
• Pero para aprovecharlos necesitamos entender para que nos han sido dados.
○ El ser humano tiene un alma que debe estar modelada por los pensamientos y las emociones que nos dirigen a tomar decisiones sabias (el corazón), y cada uno de esos elementos corresponde a un tipo de inteligencia necesaria.
○ Los pensamientos corresponden al tipo de inteligencia racional (que tiene que ver con el entendimiento de las cosas y del mundo que nos rodea).
○ Las emociones a la inteligencia emocional (que tiene que ver con la forma de relacionarnos adecuadamente con las cosas en función de las personas, los demás y nosotros mismos (empatía).
• Para tomar decisiones sabias necesitamos la participación de todo nuestra alma (por ello el Señor nos llama a amarlo con toda nuestra alma: pensamientos y sentimientos).
○ Ambos, pensamientos y sentimientos derivan de las consecuencias de la experiencia pasada, por ello el Señor nos llama a renovar el alma que anteriormente era egoísta y egocéntrica, con sus pensamientos y emociones (amor a Dios, al prójimo y a nosotros mismos).
○ La combinación de ambas nos permite tomar buenas decisiones.
§ La Palabra apunta en primer lugar a alimentar y dirigir nuestros pensamientos a la decisión racional correcta (amor a Dios) y también nos enseña a discernir los sentimientos que son conforme a su corazón de los que son contrarios a Su corzón.
§ El Espíritu Santo nos ayuda a dirigir la aplicación de esos pensamientos de una forma empática (amor al prójimo y a nosotros mismos).
○ Es en la combinación de ambos que tomamos decisiones sabias "La letra mata pero el Espíritu vivifica" (2 Cor 3:6).
• Por otro lado, los pensamientos nos dirigen al conocimiento, al entendimiento (que debe ser balanceado con la revelación), mientras el Espíritu nos dirige a la revelación (que debe ser consecuente y balanceada por la Palabra --pensamiento--)
○ Si somos solo racionales: fríos, rígidos. inflexibles, juzgadores, faltos de empatía (solo racionales: legalistas).
○ Si somos solo emocionales: seremos fácilmente engañados, de doble ánimo, sujetos a cambios explosivos de carácter (bipolares). Solo emocionales (sin fondo, superficiales).
○ Necesitamos desarrollar ambas inteligencias para vivir una vida equilibrada.
• Y el regalo de Dios para nosotros, para que alcancemos esa meta son ambos: la Palabra y el Espíritu Santo.
○ La Palabra (el consejo completo: equilibrio en nuestro pensamiento).
§ 2 Cor 4:4. "en los cuales el dios de este siglo cegó el entendimiento de los incrédulos, para que no les resplandezca la luz del evangelio de la gloria de Cristo, el cual es la imagen de Dios."
§ Sal 119:18-19. "Abre mis ojos, y miraré las maravillas de tu ley. Forastero soy yo en la tierra; no encubras de mí tus mandamientos."
§ Sal 119:105. "Lámpara es a mis pies tu palabra, y lumbrera a mi camino."
§ Jn 8:31-32. Conoceremos la Verdad y la Verdad nos hará libres: del dolor, del resentimiento, de las obras de las tinieblas, del miedo, de la ansiedad, de la angustia, del stres, de la depresión, de la tristeza, de la frustración, de la decepción, del desánimo, en fin, de toda emoción negativa.
○ La condición para todo ello:
§ Sal 119:59: consideré mis caminos y volví mis pies a tus testimonios.
• El Espíritu Santo:
○ Nos empodera para guardar la Palabra (Jn 14:15-17).
○ Derrama el amor de Dios en nuestros corazones.
○ Nos redargüye y corrige.
○ Produce en nosotros el fruto del Espíritu.
○ Nos enseña.
○ Nos guía.
○ Nos fortalece.
○ Nos consuela.
○ Nos ayuda en todas las cosas y entre ellas, la oración que nos muestra las cosas grandes y ocultas que no conocemos.
○ Nos defiende.
○ Nos santifica.
• La Palabra y el Espíritu actúan en conjunto en nosotros (colaboración, sinergia) para alcanzar la plenitud de vida.
22
Mar
2022