Estudio Bíblico

Resolver los conflictos a tiempo (Mat_5:25-26).
Los conflictos son parte de la vida "normal" de los seres humanos:
• Por el pecado personal.
• Por el pecado que nos rodea.


Etapas en las relaciones humanas.
Las relaciones humanas son una parte muy importante del cristianismo (Mat_22:36-40).
De hecho, son el cristianismo.
Todas las relaciones humanas se desarrollan (o mueren) a través de ciclos repetitivos (círculos virtuosos) que implican las siguientes etapas:
• Atracción (simpatía).
• Apertura (intimidad, sinceridad, autenticidad).
• Exposición (vulnerabilidad).
• Conflicto (van a suceder por nuestra imperfección y porque vivimos en un mundo de pecado).
• Separación (distanciamiento, aislamiento).
• Arrepentimiento (reconocimiento de nuestros propios errores, faltas, decisiones, pecados, etc.).
• Reconciliación (pedir perdón y perdonar).
• Unidad (alcanzar un mayor nivel de relación).
Los momentos claves son los que se refieren a la etapa del conflicto a la reconciliación.
Si las logramos superar, la relación va a ir madurando hacia la plenitud.
Cada vez que superamos un conflicto y llegamos a la unidad, comienza un nuevo ciclo de lo mismo solo que a un nivel superior.
Podemos decir con toda propiedad y seguridad que el conflicto en las relaciones interpersonales es inevitable; el camino hacia la unidad pasa por allí.
Y superar el conflicto implica, en cierto nivel, la "muerte" (negación) del yo, del ego. (Jua_17:21-23, Efe_4:2-3).


Siete pasos bíblicos para restaurar una relación.
• Hablar con Dios antes que con la persona (prevención de conflictos).
○ Muchos de nuestros conflictos se deben a necesidades insatisfechas (esperamos que los demás las satisfagan y no lo hacen).
○ Otros son por la falta de dirección del Espíritu Santo cuando tomamos decisiones.
○ En ambos casos, en vez de depnder de Dios dependemos de los demás o de nosotros mismos.
○ Necesitamos acudir a Dios primero en busca de provisión y dirección.
• Tomar la iniciativa siempre.
○ No importa quién haya sido el ofendido y quién el ofensor.
○ Dios espera que demos el primer paso en cualquiera de las dos situaciones.
○ Restaurar las relaciones es tan importante para el Señor que le asigno una prioridad incluso por encima de la adoración (las ofrendas) (Mat_5:23-24).
○ Y ese paso debe darse lo más rápidamente posible (Efe_4:26-27).
• Ser comprensivo.
○ Necesitamos "escuchar" atentamente los sentimientos de la otra persona, aunque no sean infalibles ni lógicos (Sal_73:21-22).
○ Pedimos perdón no porque no tengamos razón, pedimos perdón porque hemos lastimado y/u ofendido al otro.
• Reconocer y confesar nuestra parte en el conflicto.
○ Un conflicto siempre tiene dos partes involucaradas.
○ Necesitamos reconocer y confesar nuestros propioserrores y/o pecados (1Jn_1:8).
○ No nos excusemos ni culpemos al otro, reconozcamos con sinceridad nuestra parte en el conflicto.
• Atacar el problema, no a la persona.
○ No es posible que solucionemos un conflicto si lo que nos interesa es encontrar culpables (que generalmente no vamos a ser nosotros por supuesto).
○ Por el otro lado también cuidemos nuestras palabras para que no aumenten| el conflicto en lugar de resolverlo (Pro_12:16).
• Renunciar a nosotros mismos, al orgullo.
○ La paz muchas veces tiene un precio y es el de doblegar nuestro orgullo, nuestro egoísmo, nuestro ego (Rom_12:18)(Heb_12:14).
○ Implica renunciar a utilizar el arsenal de la carne: desaprobación, menosprecio, comparaciones, etiquetas, insultos, condescendencia, sarcasmo, arrogancia, jactancia, etc.
• Enfocarnos en la reconciliación, no en la resolución del desacuerdo.
○ La reconciliación se enfoca en la relación.
○ La resolución se enfoca en el problema.
○ Cuando nos enfocamos en la reconciliación el problema debe pasar a un segundo plano y/o volverse irrelevante.
○ Dios busca en nosotros la unidad, no la uniformidad, de tal manera que podemos relacionarnos y caminar con otros a pesr de algunos desacuerdos (1Pe_3:11).