Perlas de la Palabra. El amor "porque" versus el amor "aunque".
En el mundo dos tipos de amor.
• El amor “porque”:
• Un amor condicional, contractual, interesado, de conveniencia.
• Hacemos buenas cosas.
• Porque damos buenas cosas.
• Porque somos buenas personas.
• Porque llenamos las expectativas de otros, en el ser, hacer, dar,
• Etc.
• El amor “aunque”:
• Un amor verdadero.
• Aunque no hagamos buenas cosas.
• Aunque no demos buenas cosas
• Aunque no seamos buenas personas.
• Aunque no llenemos las expectativas de otros en el ser, hacer, dar.
• El amor “porque” es el amor que prevalece en el mundo.
• Es un amor merecido, meritocrático.
• Es el amor que se profesa en las religiones: un amor por buenas obras, por ser buenas personas.
• Pero en nuestro Dios, Jehová, el amor que prevalece es el amor “aunque”:
• Amo a Israel, aunque era un pueblo indigno.
• Nos amó a nosotros, aunque éramos lo vil del mundo, pecadores, enemigos de Dios.
• Y nos adoptó siendo esas cosas, y aunque aún ahora, no seamos todo lo que deberíamos ser.
• Por el amor “porque” es que muchas personas se privan del regalo de la salvación en Cristo:
• No se sienten merecedores, dignos, aptos, capaces de recibir Su Amor.
• O porque creen que no lo necesitan porque hacen algunas buenas cosas, dan algunas buenas cosas, son algunas veces buenas personas.
• Pero en Dios no hay términos medios.
• O es todo o nada (Rom_3:10-12, Rom_3:18).
• Y como nunca es todo, para ello está Su Amor “aunque” para recibirnos a pesar de ello.
• Si reciben la salvación viven con culpa permanente porque todavía pecan, tomas malas decisiones, cometen errores, fracasan, etc.
Necesitamos renovar nuestro entendimiento acerca del amor de Dios para nosotros Sus hijos:
• Nos ama con amor eterno (Jer_31:3).
• Perdona y olvida nuestros pecados y nunca más se acordará de ellos (Heb_8:12, Heb_10:17).
• Aunque aún las personas más cercanas nos abandonen, Él nunca lo hará (Isa_49:15, Heb_13:5).
• Si aún no hemos recibido la plenitud del amor de Dios en Cristo, volvámonos a Él de todo corazón (hoy es el tiempo en el que puede ser hallado).
• Si ya lo hemos hecho, sigamos buscando refugiarnos en la anchura, la altura, la profundidad y la largura del amor de Dios en Cristo que sobrepasa todo entendimiento meditando en todas las manifestaciones de amor cotidiano en nuestras vidas y renovando nuestro entendimiento.
• El amor “porque”:
• Un amor condicional, contractual, interesado, de conveniencia.
• Hacemos buenas cosas.
• Porque damos buenas cosas.
• Porque somos buenas personas.
• Porque llenamos las expectativas de otros, en el ser, hacer, dar,
• Etc.
• El amor “aunque”:
• Un amor verdadero.
• Aunque no hagamos buenas cosas.
• Aunque no demos buenas cosas
• Aunque no seamos buenas personas.
• Aunque no llenemos las expectativas de otros en el ser, hacer, dar.
• El amor “porque” es el amor que prevalece en el mundo.
• Es un amor merecido, meritocrático.
• Es el amor que se profesa en las religiones: un amor por buenas obras, por ser buenas personas.
• Pero en nuestro Dios, Jehová, el amor que prevalece es el amor “aunque”:
• Amo a Israel, aunque era un pueblo indigno.
• Nos amó a nosotros, aunque éramos lo vil del mundo, pecadores, enemigos de Dios.
• Y nos adoptó siendo esas cosas, y aunque aún ahora, no seamos todo lo que deberíamos ser.
• Por el amor “porque” es que muchas personas se privan del regalo de la salvación en Cristo:
• No se sienten merecedores, dignos, aptos, capaces de recibir Su Amor.
• O porque creen que no lo necesitan porque hacen algunas buenas cosas, dan algunas buenas cosas, son algunas veces buenas personas.
• Pero en Dios no hay términos medios.
• O es todo o nada (Rom_3:10-12, Rom_3:18).
• Y como nunca es todo, para ello está Su Amor “aunque” para recibirnos a pesar de ello.
• Si reciben la salvación viven con culpa permanente porque todavía pecan, tomas malas decisiones, cometen errores, fracasan, etc.
Necesitamos renovar nuestro entendimiento acerca del amor de Dios para nosotros Sus hijos:
• Nos ama con amor eterno (Jer_31:3).
• Perdona y olvida nuestros pecados y nunca más se acordará de ellos (Heb_8:12, Heb_10:17).
• Aunque aún las personas más cercanas nos abandonen, Él nunca lo hará (Isa_49:15, Heb_13:5).
• Si aún no hemos recibido la plenitud del amor de Dios en Cristo, volvámonos a Él de todo corazón (hoy es el tiempo en el que puede ser hallado).
• Si ya lo hemos hecho, sigamos buscando refugiarnos en la anchura, la altura, la profundidad y la largura del amor de Dios en Cristo que sobrepasa todo entendimiento meditando en todas las manifestaciones de amor cotidiano en nuestras vidas y renovando nuestro entendimiento.
06
Mayo
2024