Perlas. La enseñanza de las fiestas hebreas de la cosecha.
Las fiestas hebreas relacionadas con la cosecha.
• El pueblo de Israel fue ordenado por Dios en el desierto que cuando entrarán en la Tierra Prometida:
• Celebrarían la fiesta de las primicias (el inicio de la cosecha, Exo_23:19).
• Y también la fiesta de la cosecha (la fiesta de los Tabernáculos) al final de la primavera (Deu_16:15).
• Pero en el año 70 D.C. la ciudad de Jerusalén fue destruida, la tierra asolada y el pueblo judío expatriado de la tierra prometida, dispersado por todo el mundo romano de ese tiempo.
• Ya no había más cosechas, ni más grano o frutos que recoger.
• Pero, aun así, siguieron celebrando esas fiestas.
• Después de casi dos mil años celebrando las cosechas inexistentes, volvieron a aparecer en la Tierra Prometida (Jer_31:3-5).
• Los hijos de este mundo se alegran tras ver sus bendiciones.
• Pero los hijos del Reino hacemos lo contrario.
• Celebramos antes y después las bendiciones.
• Las primicias (antes), y los diezmos y las ofrendas (después).
Aplicación práctica:
El justo por la fe vivirá (Hab_2:4, Rom_1:17, Gal_3:11, Heb_10.38)
• No esperemos a ver nuestras bendiciones para gozarnos.
• Gocémonos, celebremos anticipadamente nuestras bendiciones y las veremos llegar.
• No esperemos a que venga el regalo para entonces dar gracias.
• Demos gracias anticipadamente y el regalo vendrá.
• No esperemos a que nuestras circunstancias sean mejores para celebrar.
• Celebremos ya (1Ts_5:16-18) y todo estará bien.
• No esperemos a conseguir la victoria para sentirnos victoriosos.
• Sintámonos victoriosos y obtendremos la victoria (Sal_23:4-6, Rom_8:37).
• Celebremos las bendiciones que aún no vemos.
• Celebremos la cosecha que aún no tenemos, y tendremos una cosecha que celebrar.
Bibliografía: "El Libro de los Misterios", Jonathan Cahn.
• El pueblo de Israel fue ordenado por Dios en el desierto que cuando entrarán en la Tierra Prometida:
• Celebrarían la fiesta de las primicias (el inicio de la cosecha, Exo_23:19).
• Y también la fiesta de la cosecha (la fiesta de los Tabernáculos) al final de la primavera (Deu_16:15).
• Pero en el año 70 D.C. la ciudad de Jerusalén fue destruida, la tierra asolada y el pueblo judío expatriado de la tierra prometida, dispersado por todo el mundo romano de ese tiempo.
• Ya no había más cosechas, ni más grano o frutos que recoger.
• Pero, aun así, siguieron celebrando esas fiestas.
• Después de casi dos mil años celebrando las cosechas inexistentes, volvieron a aparecer en la Tierra Prometida (Jer_31:3-5).
• Los hijos de este mundo se alegran tras ver sus bendiciones.
• Pero los hijos del Reino hacemos lo contrario.
• Celebramos antes y después las bendiciones.
• Las primicias (antes), y los diezmos y las ofrendas (después).
Aplicación práctica:
El justo por la fe vivirá (Hab_2:4, Rom_1:17, Gal_3:11, Heb_10.38)
• No esperemos a ver nuestras bendiciones para gozarnos.
• Gocémonos, celebremos anticipadamente nuestras bendiciones y las veremos llegar.
• No esperemos a que venga el regalo para entonces dar gracias.
• Demos gracias anticipadamente y el regalo vendrá.
• No esperemos a que nuestras circunstancias sean mejores para celebrar.
• Celebremos ya (1Ts_5:16-18) y todo estará bien.
• No esperemos a conseguir la victoria para sentirnos victoriosos.
• Sintámonos victoriosos y obtendremos la victoria (Sal_23:4-6, Rom_8:37).
• Celebremos las bendiciones que aún no vemos.
• Celebremos la cosecha que aún no tenemos, y tendremos una cosecha que celebrar.
Bibliografía: "El Libro de los Misterios", Jonathan Cahn.
10
Jun
2024