La necesidad de ser un discípulo.
TEXTOS PARA MEMORIZAR.
Mat 28:18-20, Luc 14:26-27, Luc 14:33, Mar 3:14.
LA META DEL SEÑOR PARA CADA CREYENTE.
Mat 28:18-20:
• Hacer discípulos (no solo simpatizantes, ni solo creyentes).
• No solo salvos, esa es solo la puerta de entrada.
• No siervos, obreros, ministros: ese es uno de los frutos del discipulado.
• Discípulos: como Cristo, personas que guarden todo lo que Jesús nos ha mandado.
La Palabra se usa:
• En singular: 22 veces en los Evangelios y 4 veces en el Libro de Hechos.
• En plural: 203 veces en los Evangelios y 26 veces en el Libro de Hechos.
• En total: 225 veces en los Evangelios y 30 veces en el Libro de Hechos.
Llama la atención el uso plural por encima del singular: ello es así porque los discípulos nos hacemos unos a otros, unos con otros, unos por otros. En Cristo no son posible los "Llaneros Solitarios".
MUCHOS CREYENTES SON SALVOS PERO NO SON DISCÍPULOS:
La salvación es aceptar la obra de Cristo en la Cruz, una obra de substitución en la que Cristo
murió por nosotros en ella.
El discipulado es tomar nuestra cruz, una obra de identificación en la que nosotros morimos con El.
¿QUÉ ES UN DISCÍPULO?
Uno que es enseñado o entrenado, un aprendiz o alumno; uno que recibe instrucción de otro, que acepta la instrucción o las doctrinas de otro (2 Tim 2:2, Mar 4:34).
La palabra deriva de otra palabra que significa disciplina.
• Entrenamiento que desarrolla el imperio sobre sí mismo, carácter.
• Sumisión, dominio propio (Efe 5:21).
• Conducta ordenada.
Un discípulo es uno que es sujeto, uno que está en entrenamiento, uno que es disciplinado por Cristo Jesús (Luc 6:40, Mat 10:24-25).
• El discípulo no lo es de una persona terrenal. Debe ser de Cristo.
• La persona que discipula solo es un colaborador (1 Cor 3:9, 2 Cor 6:1) del Señor para tal fin. Su objetivo debe ser que el discípulo siga a Cristo no a sí mismo (a menos que el discipulador siga en todo a Cristo, 1 Cor 11:1).
Mat 28:18-20, Luc 14:26-27, Luc 14:33, Mar 3:14.
LA META DEL SEÑOR PARA CADA CREYENTE.
Mat 28:18-20:
• Hacer discípulos (no solo simpatizantes, ni solo creyentes).
• No solo salvos, esa es solo la puerta de entrada.
• No siervos, obreros, ministros: ese es uno de los frutos del discipulado.
• Discípulos: como Cristo, personas que guarden todo lo que Jesús nos ha mandado.
La Palabra se usa:
• En singular: 22 veces en los Evangelios y 4 veces en el Libro de Hechos.
• En plural: 203 veces en los Evangelios y 26 veces en el Libro de Hechos.
• En total: 225 veces en los Evangelios y 30 veces en el Libro de Hechos.
Llama la atención el uso plural por encima del singular: ello es así porque los discípulos nos hacemos unos a otros, unos con otros, unos por otros. En Cristo no son posible los "Llaneros Solitarios".
MUCHOS CREYENTES SON SALVOS PERO NO SON DISCÍPULOS:
La salvación es aceptar la obra de Cristo en la Cruz, una obra de substitución en la que Cristo
murió por nosotros en ella.
El discipulado es tomar nuestra cruz, una obra de identificación en la que nosotros morimos con El.
¿QUÉ ES UN DISCÍPULO?
Uno que es enseñado o entrenado, un aprendiz o alumno; uno que recibe instrucción de otro, que acepta la instrucción o las doctrinas de otro (2 Tim 2:2, Mar 4:34).
La palabra deriva de otra palabra que significa disciplina.
• Entrenamiento que desarrolla el imperio sobre sí mismo, carácter.
• Sumisión, dominio propio (Efe 5:21).
• Conducta ordenada.
Un discípulo es uno que es sujeto, uno que está en entrenamiento, uno que es disciplinado por Cristo Jesús (Luc 6:40, Mat 10:24-25).
• El discípulo no lo es de una persona terrenal. Debe ser de Cristo.
• La persona que discipula solo es un colaborador (1 Cor 3:9, 2 Cor 6:1) del Señor para tal fin. Su objetivo debe ser que el discípulo siga a Cristo no a sí mismo (a menos que el discipulador siga en todo a Cristo, 1 Cor 11:1).
05
Ene
2009