Estudio Bíblico

Los diez leprosos (Luc_17:11-19).
• En el camino a Jerusalén, Jesús se topó con diez leprosos que le clamaban por su sanidad.
• Y Jesús, en respuesta a su petición, los envío para que fueran a presentarse con el Sumo Sacerdote para que les certificará su sanidad.
• No los sanó inmediatamente, pero iban a sanar en el camino.

¿Podemos imaginarnos como se sintieron los leprosos de su sanidad?
• Si estamos en Cristo podemos.
• Lo que Él hizo por los leprosos físicamente, lo hizo con nosotros espiritualmente.
• El pecado nos vuelve leprosos a todos y nos convierte en cadáveres espirituales (Efe_2:1).
• Lo que Jesús vio en el cuerpo de los leprosos lo ve en el alma del pecador:
• Devastación total.
• Asimismo, lo que Él hizo por ellos lo hace por quién tenga el corazón dispuesto (Isa_55:6, Isa_1:18, Hch_2:21).
• No por nuestros méritos, sino por Su Gracia (Efe_2:4-5, Efe_2:8-9).
• Si aún no le has entregado tu vida a Cristo, este es el tiempo, y si ya se la entregaste, también es tiempo de ir un paso más adelante.
• Enfoquémonos en el sacrificio de Cristo en la Cruz.
• Busquemos en la Palabra todo lo que sucedió en la Cruz de Cristo a favor de nosotros.
• Meditemos largamente en ello (no lo tomemos a la ligera).
• Dominemos el lenguaje de la redención: salvos, libres, sanos, restaurados, guardados, adoptados, provistos, asegurados, fortalecidos, empoderados, etc.
• Metámonos de lleno en el currículum de la Gracia.
• Es fácil descuidarnos, distraernos, ser ingratos, etc., pero ello no debe ser así (2Ti_2:1).
• Especialicémonos en la Gracia de Dios.
• Reconozcamos todos los regalos de Dios, comenzando por la Salvación (Heb_2:1-3).



Bibliografía: "Gran día cada día", Max Lucado.