Prosperidad.
Definición de prosperidad.
Dos formas de conceptualizar la prosperidad:
Uno. Según el mundo: bienestar material, buena marcha de los negocios, que se desenvuelve favorablemente, mejora de situación económica, etc. (Dicc. Larousse).
Dos. Según Dios.
El significado bíblico de la prosperidad.
Abarca el ser completo de la persona humana (3 Jn 2, 1 Tes 5:23): espíritu, alma y cuerpo.
Definición bíblica:
La habilitación de parte de Dios con todas las bendiciones necesarias para cumplir Su propósito y sueño para nuestras vidas (Gen 1:28, Deut 8.18, Jer 29.11, Prov 4:18).
Un estado de ánimo, un ambiente que manifiesta las características de seguridad, confianza, credibilidad, justicia, identidad, esperanza, equidad, libertad, etc. bienestar individual, social, moral y económico de las personas nos permite llegar a ser todo lo que Dios nos diseñó para ser.
Integralidad de la prosperidad de Dios (3 Jn 2).
Dios desea que seamos prosperados en todas las cosas y tengamos salud.
Todas las cosas son todas las cosas, no es exclusiva de lo económico.
o Relación con Dios.
o Matrimonio y familia.
o Fruto del Espíritu, servicio, dones.
o Habilidades y capacidades, carácter
o Trabajo, negocios.
No podemos esperar prosperidad económica sin prosperar en todo lo demás.
Así como prospera nuestra alma: la condición (la prosperidad no es automática a la salvación o a ser parte de una iglesia).
La prosperidad: una posibilidad que requiere trabajar con Dios para lograrla (1 Cor 3:9, 2 Cor 6:1).
El quiere, y ya hizo todo para que nosotros fuéramos prosperados en todas las cosas.
Jesús se hizo pobre para que nosotros fuéramos enriquecidos en todo (2 Cor 8:9).
Necesitamos hacer nuestra parte: renovar (prosperar) nuestra mente (Rom 12:2), cambiar nuestra manera de pensar para que cambie nuestra manera de vivir.
Dos formas de conceptualizar la prosperidad:
Uno. Según el mundo: bienestar material, buena marcha de los negocios, que se desenvuelve favorablemente, mejora de situación económica, etc. (Dicc. Larousse).
Dos. Según Dios.
El significado bíblico de la prosperidad.
Abarca el ser completo de la persona humana (3 Jn 2, 1 Tes 5:23): espíritu, alma y cuerpo.
Definición bíblica:
La habilitación de parte de Dios con todas las bendiciones necesarias para cumplir Su propósito y sueño para nuestras vidas (Gen 1:28, Deut 8.18, Jer 29.11, Prov 4:18).
Un estado de ánimo, un ambiente que manifiesta las características de seguridad, confianza, credibilidad, justicia, identidad, esperanza, equidad, libertad, etc. bienestar individual, social, moral y económico de las personas nos permite llegar a ser todo lo que Dios nos diseñó para ser.
Integralidad de la prosperidad de Dios (3 Jn 2).
Dios desea que seamos prosperados en todas las cosas y tengamos salud.
Todas las cosas son todas las cosas, no es exclusiva de lo económico.
o Relación con Dios.
o Matrimonio y familia.
o Fruto del Espíritu, servicio, dones.
o Habilidades y capacidades, carácter
o Trabajo, negocios.
No podemos esperar prosperidad económica sin prosperar en todo lo demás.
Así como prospera nuestra alma: la condición (la prosperidad no es automática a la salvación o a ser parte de una iglesia).
La prosperidad: una posibilidad que requiere trabajar con Dios para lograrla (1 Cor 3:9, 2 Cor 6:1).
El quiere, y ya hizo todo para que nosotros fuéramos prosperados en todas las cosas.
Jesús se hizo pobre para que nosotros fuéramos enriquecidos en todo (2 Cor 8:9).
Necesitamos hacer nuestra parte: renovar (prosperar) nuestra mente (Rom 12:2), cambiar nuestra manera de pensar para que cambie nuestra manera de vivir.
05
Ene
2009