Venciendo la dependencia de las apariencias, del qué dirán y de la presión de grupo.
La base para la destrucción de cualquier fortaleza es:
• 2Co_10:4-5, Efe_6:10-12.
• En primer lugar, reconocer el Señorío y la Salvación de Cristo en nuestras vidas (entregarle nuestras vidas).
• En segundo lugar, creer, atesorar, hablar, y poner en práctica la Palabra de Dios.
• La base para la destrucción de fortalezas es la Palabra de Dios:
• El fundamento del escudo de la fe.
• La espada del Espíritu.
• Somos lo que la Biblia dice que somos.
• Podemos lo que la Biblia dice que podemos.
• Tenemos lo que la Biblia dice que tenemos.
• Separados de Dios nada podemos hacer.
Destruyendo la fortaleza de las apariencias, del que dirán, de la presión de grupo.
• Dios nos dice (y Él no miente):
• Nuestra misión en la tierra no es agradar a las personas sino agradar a Dios (Gal_1:10).
• Fuimos hechos originales, no copias, para ser una copia de lo que los demás quisieran que fuéramos.
• Somos una obra maravillosa, única, de Dios (Sal_139:13-16).
• Para un propósito único (Efe_2:10).
• Necesitamos desarrollar nuestra originalidad (Dios no nos hace iguales, igualitarios; nos hace equitativamente).
• A cada uno según su capacidad, a cada uno según su necesidad, a cada uno según Su propósito, a cada uno según su productividad.
• Josué fue discípulo de Moisés, pero no fue igual a Moisés.
• Salomón fue discípulo de su padre David, pero no fue igual a David.
• Timoteo fue discípulo de Pablo. pero no fue igual a Pablo.
• Los apóstoles fueron discípulos de Jesús, pero no fueron igual a Jesús.
• Celebremos nuestra originalidad y no permitamos por ningún motivo que el qué dirán, las apariencias o la presión de grupo nos dirijan a ser una persona diferente a la que fuimos creados por Dios (Pro_16:25, Jer_17:5-9).
• 2Co_10:4-5, Efe_6:10-12.
• En primer lugar, reconocer el Señorío y la Salvación de Cristo en nuestras vidas (entregarle nuestras vidas).
• En segundo lugar, creer, atesorar, hablar, y poner en práctica la Palabra de Dios.
• La base para la destrucción de fortalezas es la Palabra de Dios:
• El fundamento del escudo de la fe.
• La espada del Espíritu.
• Somos lo que la Biblia dice que somos.
• Podemos lo que la Biblia dice que podemos.
• Tenemos lo que la Biblia dice que tenemos.
• Separados de Dios nada podemos hacer.
Destruyendo la fortaleza de las apariencias, del que dirán, de la presión de grupo.
• Dios nos dice (y Él no miente):
• Nuestra misión en la tierra no es agradar a las personas sino agradar a Dios (Gal_1:10).
• Fuimos hechos originales, no copias, para ser una copia de lo que los demás quisieran que fuéramos.
• Somos una obra maravillosa, única, de Dios (Sal_139:13-16).
• Para un propósito único (Efe_2:10).
• Necesitamos desarrollar nuestra originalidad (Dios no nos hace iguales, igualitarios; nos hace equitativamente).
• A cada uno según su capacidad, a cada uno según su necesidad, a cada uno según Su propósito, a cada uno según su productividad.
• Josué fue discípulo de Moisés, pero no fue igual a Moisés.
• Salomón fue discípulo de su padre David, pero no fue igual a David.
• Timoteo fue discípulo de Pablo. pero no fue igual a Pablo.
• Los apóstoles fueron discípulos de Jesús, pero no fueron igual a Jesús.
• Celebremos nuestra originalidad y no permitamos por ningún motivo que el qué dirán, las apariencias o la presión de grupo nos dirijan a ser una persona diferente a la que fuimos creados por Dios (Pro_16:25, Jer_17:5-9).
30
Sep
2024