Venciendo a los gigantes.
En la vida cotidiana, todos los días tenemos retos que vencer.
• Algunos pequeños, otros medianos, otros grandes.
• Algunos económicos, otros físicos, otros emocionales, otros espirituales.
• Pero retos al fin.
Y algunos días, tenemos retos muy grandes que vencer.
• Ante los cuales nos sentimos ansiosos, estresados, angustiados, temerosos, indecisos, etc.
• Retos que tienen la capacidad de cambiar el rumbo de nuestras vidas en algún aspecto.
• Un reto que no se parece a ninguno que hayamos enfrentado anteriormente.
• Se asoma en el horizonte como se le asomó a David cuando fue a visitar a sus hermanos en el campo de batalla.
• Puede parecer gigantesco, imponente, furioso, fuerte, impenetrable.
• Puede consumir nuestros pensamientos y agotar nuestras fuerzas.
• Puede despertarnos en la noche y/o mantenernos despiertos.
• Y está entre la vida que Dios nos ha prometido y nosotros.
• Lo vemos, lo tenemos enfrente, no podemos evitarlo.
• Pero no lo tenemos que enfrentar solo.
• El Señor no solo está con nosotros, sino que Él quiere ser parte activa de la batalla y de la victoria.
• Primero: calma (Isa_30:15, Mat_11:28-30, Fil_4:6-8).
• No permitamos que el miedo nos domine (Job_3:25, 1Jn_4:18).
• Refugiémonos en el amor del Señor, en Su Amor paterno, en Su amor que mueve el mundo a favor de nosotros.
• Segundo: fortalecernos en el Señor y en el poder de Su Fuerza (Efe_6:10-13, Sal_23:4-6).
Cuando Josué se enfrentó con el reto de Jericó (una ciudad amurallada, pero más que amurallada, superamurallada, cerrada, que parecía un reto inalcanzable).
• Se le apareció un Ángel (seguramente Jesús) y le habló para fortalecerlo y con instrucciones (Jos_5:13-15).
• Cuando estamos en frente de un reto lo que necesitamos es dirección.
• Y Dios tiene esa dirección para nosotros (Sal_119:105, Rom_8:14).
• Y Dios nos va a comunicar esa dirección.
• Cuando de comunicaciones entre Dios y nosotros se trata, no hay reglas, Él lo puede hacer de cualquier modo, siempre que sea entendible y claro para nosotros.
• Por Su Palabra.
• Por la experiencia.
• Por alguien más que nos da un consejo o una recomendación.
• Por algo que leemos.
• Por algo que escuchamos.
• Etc.
• Y nos va a traer, soluciones, dirección, corrección, exhortación, edificación, consolación, fortaleza, etc.
Recordemos:
• No estamos solos, el Señor está con nosotros (Heb_13:5).
• El Señor es más grande que cualquier problema que nos pueda acontecer en el mundo (1Jn_4:4).
• El Señor nos dará la victoria tarde o temprano (Sal_23:4).
• El Señor nos hará más que vencedores por medio de Cristo (Rom_8:37).
• El Señor hará obrar todo para nuestro bien (Rom_8:28-29).
• El Señor nos dará la victoria en el tiempo preciso (1Pe_5:8-10).
• Algunos pequeños, otros medianos, otros grandes.
• Algunos económicos, otros físicos, otros emocionales, otros espirituales.
• Pero retos al fin.
Y algunos días, tenemos retos muy grandes que vencer.
• Ante los cuales nos sentimos ansiosos, estresados, angustiados, temerosos, indecisos, etc.
• Retos que tienen la capacidad de cambiar el rumbo de nuestras vidas en algún aspecto.
• Un reto que no se parece a ninguno que hayamos enfrentado anteriormente.
• Se asoma en el horizonte como se le asomó a David cuando fue a visitar a sus hermanos en el campo de batalla.
• Puede parecer gigantesco, imponente, furioso, fuerte, impenetrable.
• Puede consumir nuestros pensamientos y agotar nuestras fuerzas.
• Puede despertarnos en la noche y/o mantenernos despiertos.
• Y está entre la vida que Dios nos ha prometido y nosotros.
• Lo vemos, lo tenemos enfrente, no podemos evitarlo.
• Pero no lo tenemos que enfrentar solo.
• El Señor no solo está con nosotros, sino que Él quiere ser parte activa de la batalla y de la victoria.
• Primero: calma (Isa_30:15, Mat_11:28-30, Fil_4:6-8).
• No permitamos que el miedo nos domine (Job_3:25, 1Jn_4:18).
• Refugiémonos en el amor del Señor, en Su Amor paterno, en Su amor que mueve el mundo a favor de nosotros.
• Segundo: fortalecernos en el Señor y en el poder de Su Fuerza (Efe_6:10-13, Sal_23:4-6).
Cuando Josué se enfrentó con el reto de Jericó (una ciudad amurallada, pero más que amurallada, superamurallada, cerrada, que parecía un reto inalcanzable).
• Se le apareció un Ángel (seguramente Jesús) y le habló para fortalecerlo y con instrucciones (Jos_5:13-15).
• Cuando estamos en frente de un reto lo que necesitamos es dirección.
• Y Dios tiene esa dirección para nosotros (Sal_119:105, Rom_8:14).
• Y Dios nos va a comunicar esa dirección.
• Cuando de comunicaciones entre Dios y nosotros se trata, no hay reglas, Él lo puede hacer de cualquier modo, siempre que sea entendible y claro para nosotros.
• Por Su Palabra.
• Por la experiencia.
• Por alguien más que nos da un consejo o una recomendación.
• Por algo que leemos.
• Por algo que escuchamos.
• Etc.
• Y nos va a traer, soluciones, dirección, corrección, exhortación, edificación, consolación, fortaleza, etc.
Recordemos:
• No estamos solos, el Señor está con nosotros (Heb_13:5).
• El Señor es más grande que cualquier problema que nos pueda acontecer en el mundo (1Jn_4:4).
• El Señor nos dará la victoria tarde o temprano (Sal_23:4).
• El Señor nos hará más que vencedores por medio de Cristo (Rom_8:37).
• El Señor hará obrar todo para nuestro bien (Rom_8:28-29).
• El Señor nos dará la victoria en el tiempo preciso (1Pe_5:8-10).
18
Oct
2024